Cada año matamos 60 mil millones de animales terrestres y 1 billón de animales marinos para nuestro consumo. Una masacre sin parangón en la historia de la humanidad que plantea un desafío ético de primera magnitud. Este consumo desbocado agrava el problema del hambre en el mundo, provoca desequilibrios ecológicos y es nocivo para nuestra salud.
Además, instrumentalizamos los animales por razones puramente venales (tráfico de fauna salvaje), para la investigación científica o por mera diversión (corridas de toros, circos, zoológicos, etcétera).
¿Y si hubiera llegado la hora de considerar los animales no ya como seres inferiores sino como nuestros “conciudadanos” planetarios? Vivimos en un mundo interdependiente en el que la suerte de cada ser vivo está íntimamente ligada a la de los otros.
Este clarificador ensayo pone al alcance de todos los conocimientos actuales sobre los animales y nuestra manera de tratarlos. Una invitación para que cambiemos nuestra mentalidad y nuestros comportamientos y una invitación a expandir la benevolencia al conjunto de los seres vivos.
Lo leere. Bien por estas personas que despiertan conciencias. Ojala hubiera muchos mas.
Estas personas que escriben esto , son un mundo, los politicos, otro.
Seguro que es otro buen libro, y a muchos hara reflexionar.
Que bien !!
Ya he adquirido ese libro.
Adquirido.
AUPA LA GENTE SENSIBLE, QUE ABRE CONCIENCIAS.
Esta. bien que haya gente asi. A muchos, nos empapan de informacion, a otros muchos no les dira nada y pasara desapercibido, y para otros ,esto es negativo. Este ultimo gremio ,son mas malos que los animales que comen, con mucho.
Me llama la atencion que a muchos de los que dicen amar a los animales y abren factbook y blogs en su defensa, cosa que me parece muy bien, se les acaba el amor al sentarse a la mesa.
Quien respeta a los animales se está respetando a sí mismo y a todo el planeta.