El Gobierno, a través del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, ha sacado a la luz un Proyecto de Estrategia Nacional de Gestión Cinegética con el objetivo de enfrentar el movimiento social imparable que rechaza la violencia de la caza. Las administraciones y los cazadores, desesperados, intentan revitalizar una actividad que practica menos de un 2% de la población española con una estrategia que precisamente muestra lo anacrónico de la caza.
Ante esto, desde PACMA hemos presentado durante el periodo de consulta pública abierto para este proyecto nuestras alegaciones en las que mostramos nuestra frontal oposición a la caza y a los intentos desesperados del Gobierno por revivirla, apoyarla y fomentarla, una vez más.
Una actividad que condena a un infierno a miles de perros y mata de forma cruel a millones de animales cada año, que contamina nuestros montes, contribuye a la despoblación del mundo rural y perpetúa valores arcaicos, no puede ser blindada y protegida desde el Gobierno de esta forma.
Los perros usados para cazar, eternas víctimas olvidadas
Dice mucho del estado en que se encuentra la caza en nuestra sociedad que uno de los cinco objetivos marcados por esta Estrategia sea la “mejora de la imagen social de la caza”. Por mucho que traten de disfrazarla, la caza, tal y como la define la RAE, consiste en perseguir animales para matarlos, y como tal genera cada vez más rechazo en una sociedad que es cada día más empática y respetuosa con todos los animales.
Sin embargo, los sucesivos gobiernos (y también los autonómicos) se empeñan en fomentarla, inyectarle dinero público y blindarla con legislaciones, ignorando incluso recomendaciones europeas. Así, a pesar de la carta abierta que envió el Intergrupo del Parlamento Europeo sobre Bienestar y Conservación de los Animales el pasado mes de marzo al Gobierno y a las comunidades autónomas, en la que los eurodiputados expresaban su preocupación, entre otras cuestiones, por el trato que se da en nuestro país a los animales utilizados como herramientas de caza, en la Estrategia se incluye entre las acciones propuestas la de “reconocer la singularidad de los perros de caza y las rehalas” así como “promover la redacción de normativa propia que se adapte a sus circunstancias y a la actividad para las que son empleadas”, “dadas las especificidades de los perros de caza y de las rehalas que los diferencian de los animales domésticos”. No obstante, los eurodiputados ya señalaron en su carta que no existe justificación alguna para que se les dé a estos perros un trato diferente del resto de animales considerados de compañía, y que en el resto de países europeos modalidades extremadamente crueles como la montería con rehala están prohibidas.
Una vez más, el Gobierno no solo no prohíbe la caza con perros, como debería hacer, sino que continúa apoyándola, blindándola, protegiéndola, fomentándola. Mientras tanto, cada año miles de perros viven hacinados, atados con cortas cadenas, en condiciones insalubres y son desechados cuando ya no son útiles. El Gobierno está condenando a estos animales a una vida de desatención y maltrato.
Los cazadores secuestran el entorno natural
La caza secuestra nuestro entorno natural y contamina y destruye nuestra biodiversidad. Pero el Gobierno, a través de esta Estrategia, pretende disfrazarla de sostenibilidad, manifestando, sin ningún pudor, que la caza colabora en la consecución del Pacto Verde Europeo “mediante la protección y el restablecimiento de los ecosistemas naturales, el uso sostenible de los recursos y la mejora de la salud humana”. El Parlamento Europeo ya ha señalado la caza como una de las principales causas de pérdida de biodiversidad, pero, de nuevo, el Gobierno desoye las recomendaciones de Bruselas.
Desde PACMA llevamos años denunciando que la legislación española permita que más del 85% del territorio sea coto de caza, privilegiando al 1,6% de la población que tiene licencia de caza, frente al 98,4% que nos vemos privados del derecho recogido en la Constitución a poder disfrutar de un medio ambiente adecuado. Algo que tampoco entienden desde el Parlamento Europeo, como les expusieron los eurodiputados en la citada misiva.
El Gobierno también reconoce la figura «denostada socialmente» del cazador, y hace referencia a la problemática respecto a su continuidad. ¿No se dan cuenta de lo que esto quiere decir? La caza está condenada, y deben dejar de intentar revivirla; deben prohibirla. Por el contrario, proponen medidas para fomentar el acceso y la práctica de la caza a jóvenes y mujeres, algo inútil, porque sabemos que la mayoría de la sociedad (y en especial jóvenes y mujeres) rechazan frontalmente la violencia de la caza.
Una cruel, sádica y anacrónica actividad rechazada por la sociedad
Aunque desde PACMA y el resto de entidades dedicadas al bienestar y la protección de los animales nos hemos esforzado mucho por mostrar la verdad de la caza, la mejor campaña contra la caza es la que realizan a diario los cazadores, mostrando lo cruel y deleznable que es realmente esta actividad, y todo lo que conlleva: persecución, acoso, violencia, muerte, sangre,…; exhibiendo cómo, muchos de ellos, además de perseguir y matar a los animales, disfrutan, se divierten y se jactan de hacerlo, llegando incluso a mofarse de sus víctimas.
Lo que desde este Ministerio se recomienda tapar, con propuestas como “Concienciar al cazador de que todo lo que se publica en redes sociales es público y es imposible controlar el impacto y difusión de lo que se comparte”, desde PACMA lo seguiremos mostrando y denunciando.
Es inadmisible que un Gobierno que además cuenta con una Dirección General de Derechos de los Animales elabore un proyecto como este. Pero en PACMA no dejaremos de trabajar contra la caza. Mientras luchamos para conseguir su prohibición por ley, presionamos al Gobierno para restringir al máximo esta cruel y violenta práctica y para que, como mínimo, proteja de verdad a los miles de perros que son usados para cazar y prohíba el uso de animales como herramientas de caza. Miles de vidas dependen de ello.
hola
¿se puede ayudar firmando peticiones, esque no tengo plata en mi tarjeta ademas no soy de europa?
saludos
A.C